Para Elliott McPherson la evolución de Dexateensdesde sus inicios garageros hasta ese rock más o menos calmado de raíces gringas que vienen facturando de un tiempo a esta parte ha sido algo vivido con toda naturalidad y, a juzgar por los resultados de discos como “Singlewide” o “Lost and found” desde luego es el country rock un género que estos vecinos de Alabama tienen, como mínimo, tan interiorizado como la onda punk de los comienzos. Cuando aún siguen cosechando elogios por el mencionado “Singlewide” (2008), Dexateens ya se encuentran dando los últimos retoques a lo que será su siguiente trabajo de estudio. El propio Elliott nos pone al día del presente de la banda.
Hace casi año y medio desde que editásteis vuestro último álbum, “Singlewide”. Ahora que podéis verlo con cierta perspectica, ¿qué balance haceis?
Bueno, justo después de lanzar el disco hubo algunos cambios en la banda. Al principio me pareció un fastidio, pero después me he dado cuenta de que fue lo mejor que nos podía haber pasado. Ahora el grupo está más cohesionado que nunca, nuestro sonido es más intenso, y eso es porque ahora todos nos respetamos y nos apreciamos. Ya hemos empezado a trabajar en el nuevo disco y difícilmente podríamos estar más ilusionados.
Habeis recorrido un largo camino desde los días en que erais una banda de garaje hasta ahora, con un sonido más tradicional, más country. ¿Ya no sentís la necesidad de poner los amplis a toda potencia?
Siempre ponemos los amplis al máximo en directo. Eso nunca ha cambiado. “Lost and Found” y “Singlewide” son discos más tranquilos, pero los conciertos siempre han sido bastante locos. Reconozco que algo del material de los primeros tiempos no encajaría en nuestro actual repertorio, pero no pasa nada. Queríamos abrirnos a otro estilo y lo hicimos. Si hubiéramos seguido grabando discos así ahora me preguntarías si, después de seis discos iguales, no sería ya hora de probar algo nuevo. Hacemos lo que nos sale de forma natural, porque odio la idea de que me etiqueten o me metan en un saco determinado. De todas formas, nadie sale de nuestros conciertos sin la sensación de que ha tenido delante una banda de rock and roll en toda regla.
Hay quien dice que vuestra evolución es una muestra de madurez. Ahora bien, la madurez puede ser un arma de doble filo en la música, o en el arte en general. Empiezas ‘madurando’ y terminas aburriendo a las piedras, como Eric Clapton o Mark Knopfler. ¿Qué crees que separa la madurez del puro acomodamiento?
Creo que hay un momento para ver las cosas desde una perspectiva madura y otra para gritar y armar jaleo. Nuestros últimos discos han sido más calmados, pero el que estamos grabando ahora es más rock and roll que cualquier cosa que hayamos hecho. ¡Va a despertar a los muertos!
¿Te identificas con la escena del ‘americana’?
Somos un grupo de punk rock que viene del sur, así que no vemos que encajemos en esa escena. Es posible que la gente que sigue a ese tipo de grupos pueda disfrutar de algunos de nuestros discos, pero seguro que se horrorizarían del material de los comienzos. Pero me da igual si eso confunde a la gente. Hacemos lo que hacemos y ya está.
Trabajasteis con Mark Nevers en “Singlewide”, un tipo bien conocido por haber producido, entre otros, a Lambchop o Calexico. Pero Mark confiesa que los Ramones son la banda de su vida, que no sabe cómo acabó trabajando con grupos tan tranquilos. ¿Qué tal os fue con él en el estudio? ¿Trataba de inyectaros algo de ese corazón punk?
Es que sabíamos que si queríamos grabar un disco que se centrara más en la composición necesitábamos dejarlo en las manos adecuadas. Nevers entiende la importancia y lo bello que hay en lo crudo, en lo sucio; podría haber hecho de “Singlewide” un disco más pulido, pero en vez de eso dejó que las canciones sonasen tal cual las grabamos. Lo mezclamos todo en menos de un día. Nev era exactamente el productor que necesitábamos.
¿Entonces el material más antiguo y el más reciente casan bien en directo?
Normalmente basamos casi todo nuestro set en el material más reciente y sólo tocamos unos pocos temas de los primeros discos. Pero esa es otra razón por la que el disco en que estamos trabajando me tiene tan entusiasmado. Es incendiario y será ideal para los directos.
En la música country hay una larguisima tradición de ‘storytellers’, de Hank Williams a Cash, de Townes Van Zandt a Steve Earle… ¿Es más sencillo contar historias en tono country que en otros estilos más acelerados o más urgentes?
El rock and roll se basa sobre todo en la actitud y en las emociones, y eso es algo que a nosotros nos sale de forma natural. Las canciones country son siempre más reflexivas, dejan más espacio para los detalles, las imágenes. Diría que una buena canción country probablemente requiere de más instrospección.
¿Cuáles serían tus ‘stortytellers’ preferidos?
Pues todos los que has nombrado: Townes, Hank Williams Sr., Waylon Jennings, Willie Nelson… Ya abes por dónde voy.
Uno tiene la impresión de que la década que acabamos de dejar atrás ha sido la más irrelevante en toda la historia de la música popular. Sin grandes revelaciones, sin grandes iconos. ¿Tienes también esa sensación?
Desde luego, tío. Estoy completamente de acuerdo. ¿Se supone que los iconos de esta década han sido Nickelback o Kenny Chesney? ¿Serán leyenda esos tíos? Es bastante difícil de creer.
¿Y te sientes optimista con respecto al futuro del rock and roll? ¿Qué podemos hacer ahora que todo parece ya inventado?
Me siento optimista con respecto al hecho de que siempre habrá grandes bandas que serán ignoradas por las masas, porque no encajan en los esquemas de esta sociedad de consumo. Aunque no estoy de acuerdo en que todo esté ya inventado, no al menos si hablamos de temáticas, pero sí que es cierto que, si hablamos de la música, de rock and roll, nadie va a inventar ya la rueda.
¿Y qué le depara el futuro a Dexateens? Has comentado que estais en pleno proceso de gestación del nuevo disco. ¿Qué nos vamos a encontrar en él?
Tratamos de ir paso a paso. Ya antes hemos intentado planear cosas, ser ambiciosos para darnos cuenta después que nuestra suerte puede decidirse por el puro azar o por la opinión de algún blogger enteradillo. El nuevo disco lo sacaremos por nuestra cuenta. Haremos lo que siempre hacemos. Lo hemos grabado con Tim Kerr, que produjo nuestros dos primeros discos y ya nos conoce bien. Quería asegurarme de que nos supervisaba a todos los niveles. Teníamos el volumen a toda hostia cuando lo grabamos, y la mayor parte lo grabamos en directo, así que suena muy auténtico. Creo que se acerca mucho a como sonamos en los conciertos. Nos falta mezclarlo y elegir un título. Son 18 temas, prácticamente el doble de material del que suelen contener nuestros discos.
Una última curiosidad. Háblame de esa especie de fetichismo que tienes con los armarios…
(Risas) Bueno, en realidad no es ningún fetichismo, es una necesidad. Los armarios de cocina y de baño son con lo que me gano la vida. Todos tenemos nuestros trabajos. Nuestro fetichismo es el rock and roll.