Halloween-2007Parece que el amigo Rob Zombie le va cogiendo el truco a esto de hacer cine. Atrás quedan el tufo a vídeo-clip y los semiplagios de «La casa de los mil cadáveres» (y de su secuela), y ahora acaba de acometer la reescritura de uno de los evangelios de cualquier devorador de cultura basura y cine de horror como él: «Halloween». El clásico de John Carpenter que puso en el mapa al psycho Michael Myers y que erigió a Jamie Lee Curtis en reina del grito.

Zombie se mantiene respetuosamente fiel a la obra original, aunque su cinta viene con precuela incorporada que nos da algún que otro apunte sobre la personalidad de Myers y desvela lazos familiares que los halloween-adictos seguro celebran. Así, el tramo dedicado a la infancia del asesino es, a la postre, el que mejor funciona; tal vez porque es ahí donde Rob se ha sentido más libre para imprimir su sello misántropo y violento. Además, la presencia en esos primeros tramos de la película de la señora de Zombie, la mil veces sexy Sheri Moon, ayuda lo suyo a eso de centrar la retina en la pantalla. Después llega el homenaje a Carpenter en toda regla, el verdadero remake, que aporta más bien poco.Zombie se limita a rejuvenecer al psicópata y su entorno, y el resto es historia: sangre, algo de sexo y unas gotas de rock and roll. Diversión para mentes siniestras en estado puro. Exactamente lo que se espera de una (buena) entrega de la serie «Halloween» y de su (re)creador.