Hay veces en que los propios artistas dan definiciones de sus discos mucho más acertadas y ocurrentes de las que podrían pergeñar críticos y cronistas. Refiriéndose a «Retox» , Hank Von Helvete , esa mezcla rolliza entre King Diamond y el leather-boy de Village People , ha dicho que es como «una película de moteros homo-nihilista y punk-metal llena de velocidad, fuerza, sumisión y libertad». Es lo que venden Turbonegro , guasa políticamente incorrecta y rock duro, diversión y punk rock. Tal vez la furia de«Ass Cobra» o «Apocalypse Dudes» se les quedó encerrada en el tarro de la vaselina de algún cuarto oscuro de cinco estrellas; no hay duda de que sus producciones suenan ahora, y desde«Scandinavian Leather» , mucho más limpias y pulidas, y eso, entre otras cosas, les ha hecho acceder a una cierta popularidad en los Estados Unidos. Pero, con todo y con eso, aún el marinero feliz Euroboy es capaz de deshojar riffs poderosos que harían las delicias de Iggy Pop , Alice Cooper o cualquier otro peso pesado dentro de la iconografía de estos desvergonzados hijos de Odín. Campo abonado para que Von Helvete dé rienda suelta a sus andanadas de trepidación anal, desenfreno y homenajes mil a sus héroes. Al final de esta Sodoma y Gomorra en forma de CD, y antes de rendir pleitesía a los Dictators en un estribillo «prestado» del himno «Who will save rock and roll?» , los chicos vuelven a hacer el trabajo por nosotros. Así, a la pregunta de «¿What is Rock?» contestan, entre otras cosas, que «Rock es el espacio entre las pelotas y el ano, en el hombre o en el perro». Ahí mismo es donde golpean con fuerza Turbonegro y su «Retox» , y nosotros encantados de que nos azoten con sus látigos de siete puntas.
Retox, de Turbonegro
30 martes Oct 2007
Posted Críticas/Etcétera
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