Cuando hace unos diez años Rachel Arieff (Milwaukee, 1969) cambió el circuito de clubes americano por la noche barcelonesa era consciente de que se preparaba para un salto de fe hacia un abismo poco explorado. Hay que rendirse a la evidencia; en España se ha imitado el formato de la stand-up comedycon más pena que gloria. Quizá no esté en nuestra idiosincrasia. Quizá, como ella misma nos cuenta, todavía no hayamos roto ciertas cadenas. Acostumbrada a la jungla yanqui, a la competencia feroz, Arieff llegó con sus maletas, con su gato Mister Tacos y una guía de español en mil palabras. ¡No hay dolor!

http://cinedivergente.com/entrevistas/rachel-arieff